
Con profunda tristeza comunicamos el fallecimiento de Pilar Álvarez, una persona imprescindible para entender la historia del movimiento asociativo del lupus en España.
Pilar fue mucho más que una compañera: fue la fuerza que levantó el movimiento asociativo, impulsó la creación de FELUPUS y sostuvo a varias asociaciones a lo largo de más de tres décadas. Siempre lo hizo desde la generosidad, la constancia y una sabiduría tranquila que marcó a quienes tuvimos la suerte de compartir camino con ella.
Durante más de 30 años, Pilar trabajó sin descanso para dar voz a las personas con lupus, acompañarlas y mejorar su calidad de vida. Lo hizo con respeto, educación, entrega y un enorme sentido del compañerismo. Gracias a su visión y compromiso, FELUPUS es hoy una realidad consolidada que continúa su legado.
Su partida nos deja un sentimiento profundo de orfandad, pero también la certeza de que su luz seguirá guiándonos. Pilar fue guía, amiga, maestra y faro para todo un colectivo que hoy la llora, pero que también la honra.
Desde FELUPUS enviamos nuestro más sincero abrazo a su familia y a todas las personas que la quisieron y compartieron con ella esta lucha.